Qué somos las personas.
Cuán superficial
nuestro entendimiento.
Cuán finito
nuestro instinto,
cuando de ser se trata.
Cuán definitivos;
No nuestros pasos, que el viento mezcla
de vuelta en las arenas del ayer;
Más bien, el lugar al que nos llevaron.
Este desierto en el que me he despertado
después de una década de sopor.
De luto.
De vergüenza.
De huir de mi propia sombra.
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